Lo admito, a veces soy vaga. En lugar de tomarme cinco minutos para limpiar el parabrisas esta mañana, decidí que no era tan grave y que no habría problema en conducir con un poco de hielo acumulado que afectara mi visión. Mientras conducía hacia la oficina podía ver bien, pero me di cuenta, cuando me detuve en un semáforo, de que no tenía una visión perfecta. Mi percepción de profundidad estaba un poco desviada y, en general, no tenía la visión clara que necesito para conducir de la mejor manera.
Esta situación es bastante similar a la de llevar gafas con arañazos por todas partes o incluso a la de llevar gafas que no tienen un revestimiento antirreflejo en las lentes. Cuando los pacientes no compran gafas con regularidad y tratan de hacer que sus lentes rayadas duren más, están afectando a su visión. Claro que pueden ver, pero no es la mejor visión posible. Lo mismo puede decirse de los pacientes que no tienen un revestimiento antirreflejo (AR) en sus lentes. El revestimiento AR, o a veces denominado lentes “antideslumbrantes”, reduce los reflejos en las lentes debido a la luz y el deslumbramiento. Desde el punto de vista del rendimiento, esto ayuda a reducir los anillos de luz, lo que es importante cuando se conduce de noche y también cuando se mira un monitor de computadora. Desde la perspectiva de la apariencia, los revestimientos AR reducen los reflejos en las lentes, creando una mejor apariencia. Cuando se reduce el deslumbramiento en el exterior de la lente, permite que otros miren sus ojos sin reflejos molestos, lo que le da una apariencia más natural.
El Dr. Tavel Family Eye Care recomienda que siempre se haga un examen ocular anual con el mejor oftalmólogo posible por razones de salud. Además, recomendamos que compre anteojos cuando sus lentes se rayen demasiado y, para la mayoría de las personas, recomendamos un revestimiento antirreflejo para reducir el deslumbramiento y mejorar la visión.
